PREPARANDO LA CANASTILLA


Una de las cosas que más te preocupa cuando se va acercando la fecha del parto es el tener todo lo necesario para los cuidados del bebé. Si ya sois madres, todo lo que voy a contar en este post lo sabréis  e incluso puede que no estéis de acuerdo conmigo en algunos puntos. Algunas añadirían más cosas a la lista o puede que prescindieran de otras…

Cuando estaba a punto de tener a mi primera hija me volví loca buscando “listas” en la red de lo que se necesita para cambiar al bebé, alimentarle, vestirle, arroparle, entretenerle… Y a  medida que iba añadiendo objetos  a la colección de trastos que acarrea un niño crecía en mi interior la angustiosa sensación de que la maternidad me venía grande y que no iba a saber cómo hacerlo. 
A todas las madres que estén a punto de serlo y estén leyendo esta entrada os diré que se puede, aunque solo sea porque una vez que lo tienes en tus brazos, él o ella que saben perfectamente lo que tienen que hacer, se hará caca, pis, llorará porque tiene hambre o sueño, o porque está incómodo/a y enseguida aprenderás a entender sus necesidades, a controlar los cambios de pañal, a manejarte a la hora de vestirle. La maternidad es una aventura  en la que nos iniciamos sin tener ni idea, porque por muchos libros que leas, por muchas charlas de matronas a las que asistas, por muchas madres que te cuenten sus experiencias, por mucho que tu madre te eche una mano los primeros días, la experiencia es única y diferente para cada madres y cada padre.
Como os decía al principio, una de las cosas que más difícil resulta es preparar la canastilla con los útiles de aseo para el bebé. Personalmente encontré listas interminables con cosas que nunca utilicé y tuve que comprar otras con las que no había contado. Creo que no hay una lista universal que sirva para todas las mamás ni para todos los bebés, pero si tuviera que hacer una canastilla básica esto es lo que incluiría.
  •  Pañales de la talla 2. Hay pañales de talla 1 para recién nacido pero son tan pequeños que si el bebé nace con un poco más de peso de lo normal puede que le queden pequeños. Los de la talla 2 están indicados para bebés a partir de 3 kilos. Si vais a dar a luz en un hospital privado hay que llevar todo lo necesario. Para un parto normal en el que estéis ingresadas un par de días bastará con unos 12 pañales.

  • Toallitas para limpiar al bebé en cada cambio de pañal. Algunas marcas las venden en packs de 3 o 4 paquetes, lo cual merece la pena porque se gastan muy rápido.
  • Crema para la zona del pañal. Se aplica en el culete del bebé en cada cambio de pañal. Evita que la humedad provocada por el pis y la caca irrite la piel. En caso de irritaciones graves o persistentes hay que aplicar cremas especiales que te puede recomendar el pediatra o el farmacéutico.
  • Un cambiador de tela plegable que se puede llevar en la bolsa sin la que a partir de este momento no vais a salir de casa, para poder cambiarle en cualquier sitio.
  • Colonia.
  • Gel de baño. En cuanto se le caiga el cordón podéis empezar a bañar al bebé. Se utiliza en pequeñísimas cantidades para evitar irritar su piel y se echa en el agua de baño. Sirve tanto para el pelo como para el cuerpo.
  • Champú. No es imprescindible, ya que puedes usar el gel de baño.
  • Crema hidratante para hidratarle bien después de cada baño.
  • Cepillo para el pelo. Tienen las cerdas muy finitas y son muy tupidos.
  • Tijeras para las uñas. Los bebés nacen con las uñas bastante largas y son increíblemente afiladas. Hay que recortarlas con regularidad para evitar que se arañen.
  • Agua de mar o suero para la nariz. Se coloca al niño en posición horizontal con la cabeza girada hacia un lado y se le echa en la fosa nasal que queda más arriba. Se repite la operación con la otra y después se aspira con el aspirador nasal. Normalmente no les gusta nada, así que si lloran y protestan no creáis que es porque estáis haciendo algo mal. Yo siempre he utilizado Rhinomer de fuerza 1. Se compra el la farmacia
  • Aspirador nasal. Los más efectivos son los que tienen un tubito para aspirar por él porque puedes controlar la fuerza de aspirado. Tienen filtros para evitar que lleguen a la boca al aspirar (es la parte más desagradable del aseo para ambos)
  • Alcohol de 90 grados y vendas  para hacer las curas del ombligo. Os recomiendo que compréis el bote más pequeño que haya porque el cordón se cae enseguida (en una semana o antes) y se gasta muy poco.
  • Sacaleches. Mejor automático que manual porque puedes acabar con una lesión en la mano de tanto apretar. Antes de comprarlo esperad a ver cómo evoluciona la lactancia. Si el bebé mama bien no necesitaréis sacaros la leche. Hay muchas marcas pero yo utilicé el de Medela.



  • Bolsas para congelar la leche materna. Tienen que ser de lamisma marca que el sacaleches, ya que vienen preparadas para recoger la leche directamente del aparato. La leche materna aguanta hasta 4 meses en el congelador a -180 sin perder sus propiedades. En este enlace se explica cómo debe hacerse todo el proceso.
  • Biberones pequeños. Os recomendaría tener al menos un par, para tener siempre a mano un biberón limpio y esterilizado listo para usar. Los botes en los que se extrae la leche viene preparados con un tapón al que se le puede acoplar una tetina y son muy prácticos para dar la leche al bebé, ya que normalmente toman cantidades muy pequeñas. Las tetinas habrá que sustituirlas a medida que se vayan deteriorando con el uso. ¿Cada cuánto tiempo? Depende. Lo notaréis cuando empiecen a ponerse “feas”. Tanto los biberones como las tetinas tienen una indicación del fabricante que nos informa para qué edad son adecuadas. Cuanto más pequeño sea el bebé menor es el agujerito por el que sale la leche. El tipo de biberón a elegir irá en función de vuestras necesidades. Los hay normales, anatómicos, especiales para evitar los cólicos, …
  • Esterilizador de biberones. Sirve también para esterilizar los chupetes y las tetinas. Habrá que hacerlo después de cada uso en el caso de biberones y tetinas y con  frecuencia en el caso de los chupetes. Hay esterilizadores para el microondas, esterilizadores eléctricos, pastillas para esterilizar… Yo he usado el de microondas y las pastillas. En ambos casos los compré en Mercadona. Personalmente me gustan más las pastillas. Se echan en la cantidad de agua que te indica el envase (dentro de una cazuela grande lo hacía yo) y se mete lo que vayas a esterilizar durante el tiempo necesario (también lo indica el envase). Se saca, se seca y listo. Para el secado también venden unos cacharros enormes con ganchos para que cuelgues los biberones, tetinas y demás…yo los ponía sobre papel de cocina que ocupa menos espacio.
  • Baberos. Algunos bebés regurgitan pequeñas cantidades de leche tras las tomas o cuando expulsan los gases. Para evitar que os manchen os recomiendo que os coloquéis sobre el hombro en el que le vais a apoyar una toalla pequeña (de las de tocador). También resulta muy útil tenerlas cerca de la cuna siempre a mano para limpiar las babas del bebé, especialmente durante la dentición.
  • Un par de chupetes. La elección de si le vas a dar o no chupete a tu hijo es solo tuya. Hay recomendaciones a favor y en contra, como en la mayoría de los aspectos relativos a la crianza. Mis hijos los han usado para dormirse durante el primer año y nos han sido especialmente útiles para tranquilizarles en los periodos de dentición. Lo normal es que les provoque cierto rechazo la primera vez que los chupan, al igual que las tetinas, porque son muy diferentes de la teta de mamá, pero con paciencia e insistencia acaban por aceptarlos. Podéis encontrar algunos consejos y opiniones sobre su uso aquí  y aquí .
  • Mantita o arullo para arropar al bebé durante las tomas o cuando lo saques de su cuna.
  • Manoplas para evitar que se arañen.
  • Un gorrito para que no se enfríe en las primeras horas de vida.
  • Pijamas y bodies. Muchos, porque tendrás que cambiarle montones de veces, pero no demasiados porque se le quedan pequeños enseguida. Los recién nacidos crecen a una velocidad increíble y lo notarás precisamente  cuando no quepa en el pijama que le quedaba perfecto la semana pasada. Yo os recomiendo comprar alguno de recién nacido para los primeros días y el resto de la talla de 3 meses, para poder usarlos durante más tiempo. En tiendas cono H&M, Zara o Carrefour los venden en lotes muy económicos.
  • Un dispositivo para escuchar/ver al bebé. No es imprescindible a no ser que vivas en una casa muy grande o con varias plantas. Si el bebé llora lo vais a oír de día y de noche. Es parte de los superpoderes que se desarrollan cuando eres madre J
  • Discos de lactancia para la madre. Se colocan en ambos pechos para evitar que las gotitas de leche que se escapen manchen el sujetador y la ropa. Los de Mercadona están muy bien.
  • Sujetador de lactancia. Se diferencian del resto en que no llevan aros y permiten descubrir los pechos individualmente para facilitar la lactancia.
  • Varios camisones para el parto y la estancia en el hospital. Mejor si llevan botones en el pecho para poder abrirlos y dar de mamar al bebés.
  • Compresas postparto. A diferencia de las que se usan para la menstruación son de algodón y mucho más gruesas, para poder absorber toda la sangre y demás sustancias que se expulsan durante varios días tras dar a luz. Se venden en cualquier farmacia. Más información aquí http://www.bebesymas.com/postparto/las-compresas-postparto
  • Cremas antiestrías, cremas por si te salen grietas en el pecho, jabón especial para lavar la episotomía, y un largo etcétera de productos tanto para la madre como para el bebé que puedes necesitar o no. Mi consejo es que te los vayas comprando a medida que vayas necesitándolos o te los recomiende tu ginecólogo o  matrona. Así evitarás llenar la casa de más potingues y artilugios de los necesarios ¡que ya son una barbaridad!
Para las miles de dudas que te puedan surgir en los primeros días, meses y incluso años del bebé existen montones de páginas especializadas en internet, libros escritos por pediatras como “Bésame mucho” de Carlos González y miles de testimonios de madres con hijos de todas las edades que se animan a contar sus experiencias e incluso a pedir consejo escribiendo en blogs como los que se agrupan en el directorio de Madresfera.
Un último consejo: disfruta de cada segundo de vida de tu bebé porque es algo único e irrepetible.